sábado, 2 de junio de 2007

La familia divorciada de la escuela.

Las familias salvadoreñas tienen el derecho de participar en todos los asuntos académicos que atañen a sus hijos e hijas, pero sucede que, ésa participación sólo se ha delegado a la escuela, que ella haga todo el trabajo formación de sus progenitores y ellos no intervienen, es muy general ésta posición;aunque no podemos dejar de lado que un buen porcentaje de padres y madres de familia sí toman muy en serio participar , contribuir y construir junto a los maestros la formación de sus hijos. Aunque el hecho de poner a los hijos bajo la tutelo completa en los maestros/as se puede ver como un grado de confianza hacia ellos, pero no es lo indicado.
Sea como fuere los docentes y los padres de familia comparteen el compromiso de educarles.
Hay una estrecha relación indisoluble entonces entre escuela y familia.

3 comentarios:

mili dijo...

Me parece que su opinion acerca de este tema es muy general y a que deberia de tomar en cuenta otros factores sociales.

Lissy dijo...

Es un tema muy interesante, dado que muchos padres creen que la labor escolar es solo del maestro y no se dan cuenta que forman parte de este proceso tan importante

Jobernaya dijo...

¿Tienen el derecho de opinar sobre tu clase?
¿Tienen el derecho a decirte que lo que enseñas no esta bien?
¿Tienen el derecho a prescindir de tus servicios si no te adaptas a sus exigencias?
Si participan, entonces ¿Cuál es su rol? y si no participan, entonces ¿Cuál es mi rol?
La brecha entre el derecho y la confiaza es mi indiferencia.